Reconociendo el Territorio

Emmm etoooooo....cual habitacion era la mia, la señorita se enfadara conmigo si me pierdo-por los pasillos deambulaba sin rumbo fijo , sin embargo recordo que tenia un papel con un pequeño mapa para llegar a su cuarto era tipico en el ser algo despistado con ese tipo de cosas-
creo que es esta dijo mientras revisaba el papel, se apronto a entrar a su habitacion dio un traspie y de un momento a otro estaba en el piso con sus cosas regadas por todos lados era de esperarce de una persona como el.
Terminando de recoger sus trastos se incorporo y comenzo a ordenar lo que seria su nuevo hogar. Colgo fotografias de su padre en las paredes puso su computadora en el escritorio y empeso a desempacar su ropa. Concluido eso comenzo con algo parecido a un ritual, un traje plateado con incrustaciones metalicas era su objeto mas preciado solia entrenar con el, pero en su nuevo trabajo solo seria necesario si su ama lo decidia asi.
Acabado todo esto se lanzo en la cama y comenzo a divagar en sus pensamientos con la vista puesta en el techo .

Eeh, como es que se llama mi butler?-inochi dejó sus maletas en el piso y se sentó encima de una de ellas. El carro acababa de irse, y la dejó con sus cosas en la entrada de la academia, que por cierto era enorme. Su abuelo le habia dicho ‘en cuanto llegues, porfavor comportate!, no seas como siempre, y si es necesario, actua”. En realidad no se llevaba para nada con su abuelo, después de que la alejó de al lado de su madre, y la había obligado a ir a esa academia para que “se transformara en una señorita digna de la familia Tsukasa” no le cayó para nada bien, después de tantos años aparecer y la empezara a mandonear así como asi?. Pero bueno, eso era tema aparte, lo importante ahora era encontrar el famoso papel con el nombre de su Butler- o simplemente espero a que llegue alguien y se compadezca de mi, y me lleve a mi habitación- aunque no veía por ningún lado las señalizaciones de “habitación”, se dio cuenta que la academia era gigante-En fin…-suspiró y apoyó su cara en sus manos, esperando algo. Venia pasar a diferentes chicas con sus butler haciendo todo por ellas: abanicándolas, arreglándoles el cabello, algunos con libro en mano, leyéndole, y a los alumnos con sus maid, que suponía, hacían el mismo trabajo- de verdad estas niñas tontas no saben nada- acostumbrada a hacer todo por ella misma, se dio cuenta que estar en esta academia le iba a resultar un caos, sobretodo imaginándose a un Butler (por dios!, nunca hay imaginado que ella andaría arrastrando un Butler!) tras ella todo el día, sin dejarla sola ni un segundo. Comenzó a desesperarse y se levantó rápidamente de su maleta-como sino pueda encontrar la habitación por mi misma-tomó su bolso de mano y comenzó a buscar con desesperación el bendito papel con el numero de la habitación de Butler-donde lo deje!...además…si se supone que debe servirme, porque no esta aquí? Debería haber estado estado aquí con media hora de anticipación, esperándome con…comida. Por dios!...pero que pienso, si puedo hacerlo por misma, creo que ver tantas ladys haciendo nada me aumentó la pereza-volvió a sentarse-me quedaré aquí hasta que llegue, y sino llega pronto, conocerá el lado feo de inochi- luego de 2 horas de espera se decidió a buscar a su tan bendito Butler, recorrió toda la academia con sus maletas a cuestas, muchos Butler la miraban extrañados y casi avergonzándose del Butler de inochi, ya que tal comportamiento era inaceptable. Al final llegó a la habitación 501 de los Butler, inochi dejó caer las maletas con fuerza en la puerta del Butler, al que reconoció por las señas que su abuelo le había dado antes de salir, lo encontró acostado en su cama con aire taciturno- kurutax?- le preguntó con aire enfadado

-se levanto sin darle mayor importancia al llamado , algo somnoliento y al ver a su señorita ahi de pie mirandolo con una cara de enojo muy visible- s.se.se.señorita-el grito se escucho por toda la academia- pero usted no llegaba mañana?- apresura corrio a recoger las maletas de su señorita y a hacer una reverencia ante ella.
Pidio disculpas de todas las formas posibles pero a su señorita parecia no importarle- me disculpo señorita tenia entendido que llegaba mañana y pues como ve yo tambien me acabo de mudar a mi habitacion.
-sin mas preambulo se presento- soy kurutax buttler de rango c y estare a su servicio y a su lado todo el tiempo que usted lo desee si me lo permite la protegere y luchare en su noombre- luego de esto sirvio una taza de te acompañada de unos pastelillos para que la señorita esperara mientras el ordenaba el lugar.

Se quedó mirando como su "butler" corría a recogerle las maletas- En realidad, el viaje se adelantó un día-dijo-así que no te preocupes, solo necesitaba saber a quien tendría pegada todo el día conmigo-lo miró un tanto enfadada, no porque no la estuviera esperando para recibir sus maletas ni mucho menos, solo el hecho de que no supiera su llegada, y la impuntualidad, la molestó mucho. Mentras lo observaba como su butler ordenaba el lugar, se dio cuenta que era un poco torpe "para variar" pensó, ahora no solo tendría que preocuparse de poder encajar en esa "prestigiosa" academia, sino que tendría un peso extra: su butler. -mi nombre es Inochi Tsukasa, futura heredera de las empresas Tsukasa, fui obligada por mi abuelo para venir a este lugar, aunque supongo que ya lo sabes. Mucho gusto-tuvo la intención de tenderle la mano, pero su butler le ofreció pastelillos y te, así que no tuvo mas opción que aceptarla- no es necesario que me acompañes, solo necesito saber donde se encuentran los dormitorios para chicas, me gustaría poder arreglar mis cosas personales- tomó un poco de te, y se sentó encima de una de las maletas- Tengo entendido...-miraba como su butler ordenaba toda la habitación, aunque no le prestaba atención a eso, su mente esta en otra parte- que esta academia es muy grande, me gustaría que me acompañaras a recorrerla, aunque debo decir, que no estoy muy contenta de haber llegado a este lugar-de alguna manera se sentía bien poder contar lo que pensaba con alguien, aunque no lo conociera-en realidad, me han obligado a venir, asi que, espero poder llevarnos bien, y....-tomó el ultimo sorbo de te, miró para ambos lados y lo dejó en el piso de la entrada de la habitación-bueno, en cuanto termines de arreglar tu cuarto podríamos irnos, no crees?-